Porvenir ha consolidado su posición como una organización líder en sostenibilidad, con diversos reconocimientos que reflejan una integración estratégica de principios ambientales, sociales, económicos y de gobernanza, lo que refuerza su reputación y su capacidad para generar valor compartido con sus grupos de interés, operando bajo principios éticos, responsables y sostenibles.
El Pacto Mundial de la ONU, la iniciativa por la sostenibilidad corporativa más grande del mundo ha dejado claro que el único camino para lograr un modelo económico que garantice un futuro próspero es a través de las inversiones y políticas que pongan los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) en el centro de los negocios.
Un reto nada menor es que solo faltan cinco años para hacer un corte de cuentas en 2030 y analizar si se consiguieron los compromisos y metas planteadas pasa 2025 sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), también de la ONU.
El ‘boom’ de la inclusión de criterios ESG llevó a que las principales empresas y organizaciones del mundo pusieran su foco organizacional allí, y aunque en el último año el auge de la IA está atrayendo parte de la inversión privada, según la consultora Bain & Company, esta misma enfatiza en que los Criterios ESG son el camino para un desempeño financiero sólido y la sostenibilidad del negocio a largo plazo en mercados cada vez más selectivos.
Diversos estudios liderados por firmas como Bain, con su “Do ESG Efforts Create Value?” que evaluó el impacto en 100.000 empresas, y el ESG Reporting de EY, dan Insights interesantes de por qué el tema no fue un interés pasajero, sino una apuesta de cara al futuro. El primero dice; por ejemplo, que las empresas que impulsan las prácticas éticas, medioambientales y laborales dentro de sus cadenas de suministro son más rentables, el uso de energías renovables contribuye a mayores márgenes de EBITDA en las industrias con altas emisiones de carbono, o que las empresas con más mujeres en el equipo ejecutivo obtienen mejores resultados financieros.
El ESG Reporting de EY subraya que en este momento no solo es necesario apostarle a iniciativas en materia ambiental, social y de gobernanza, sino que se deben hacer reportes constantes para tener información certera, con esto no solo se puede mejorar, sino que se da un parte de tranquilidad a los stakeholders, a empresas del sector para que se animen a tener políticas robustas, e incluso motiva a los tomadores de decisión para crear políticas públicas que alienten al tejido empresarial a andar este camino. EY también agrega que con tecnologías como la IA serán clave para transformar ese conocimiento ‘en crudo’ de las iniciativas y el análisis de datos para generar valor a largo plazo.
En Latinoamérica, Colombia tiene grandes oportunidades
El país, catalogado como megadiverso, es hogar de más del 10 % de todas las especies conocidas, es ‘cuna del agua’ por ecosistemas como los páramos y los ríos voladores, y su vasta amazonia es clave para la captura de CO2. Es decir, Colombia es un destino atractivo para que los criterios ESG lideren la transformación hacia un futuro más verde.
Según el Banco Mundial, el país hizo una apuesta ambiciosa en diciembre de 2020 cuando, en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, se comprometió las emisiones de gases de efecto invernadero en un 51 % para 2030 y a lograr la neutralidad de carbono para 2050.
El país ha dado pasos importantes, como establecer un marco de bonos verdes, donde la emisión inaugural de estos recibió el reconocimiento Bono Verde Soberano del Año otorgado por Environmental Finance en 2022; también, proponer el cambio de deuda por cuidado de la naturaleza, crear mecanismos para que el sector privado y solidario vean en las acciones sostenibles una opción para invertir en su negocio y en el futuro del país.
En el país sobresalen algunos casos de éxito que demuestran la importancia de incorporar criterios Ambientales, Sociales, Económicos y de Gobernanza en su estrategia corporativa. Uno de los más interesantes es Porvenir, la Administradora de Pensiones y Cesantías, que viene trabajando en el tema con iniciativas dentro de la compañía, desde el 2020 decidió crear su primer modelo de sostenibilidad enfocado en potenciar sus buenas prácticas y en generar un plan de acción que le permitiera seguir teniendo un crecimiento inclusivo y responsable.
La entidad dice que siempre ha reconocido que este tema es una construcción continua, que no es una política estática, sino que debe tener en cuenta la opinión de sus grupos de interés y las dinámicas sociales y ambientales. Con eso en mente, en 2022 actualizaron su modelo de sostenibilidad, y en 2023 dieron un paso aún más grande, evaluar la madurez de su modelo con la ayuda de Compartamos con Colombia; el resultado, una calificación de más del 80 % que la reconoce como una compañía comprometida con la sostenibilidad.
En línea con lo anterior y en pro de la mejora continua, en 2024 la compañía decidió someterse a un riguroso proceso de evaluación con ICONTEC, que resultó en que obtuvieron el Sello de Sostenibilidad en la categoría platino, la más alta. Este reconocimiento avala su compromiso con el desarrollo sostenible y su capacidad para generar valor compartido.
Tres reconocimientos que certifican el compromiso de Porvenir con el desarrollo sostenible
Obtener el Sello de Sostenibilidad ICONTEC en categoría platino es un reconocimiento al compromiso de las empresas con la sostenibilidad. Para alcanzarlo, deben someterse a un riguroso proceso de auditoría que verifica la integración de prácticas sostenibles dentro de su estrategia corporativa, y Porvenir lo ha conseguido de forma sobresaliente.
Según Roberto Enrique Montoya Villa, director Ejecutivo de ICONTEC, “la sostenibilidad es un concepto transversal a todo el sistema productivo, en el cual el sector financiero juega un rol altamente influyente. A través de los parámetros técnicos que establece nuestro Sello de Sostenibilidad ESG Verified, las empresas cuentan con más herramientas y lineamientos para transformarse e implementar mejores prácticas en las tres dimensiones de la sostenibilidad: ambiental, social y de gobernanza, fortaleciendo así su competitividad en el mercado global”.