En la cotidianidad, se escuchan las expresiones de vivir y sobrevivir. En las charlas o conversatorios motivacionales se invita al ser humano a vivir, en vez de sobrevivir, es decir, dejar de llevar una vida donde las circunstancias lo vayan llevando como una corriente
que arrastra el agua del río hacia el mar. Esta analogía se puede aplicar a la vida empresarial, cuando las compañías hacen un alto en el camino y dejan de seguir la corriente, y deciden implementar acciones e iniciativas innovadoras que les conducen a la regeneración de
los sistemas en todos los sentidos. Muchas han comenzado a seguir esta ruta, razón por la cual lanzamos la edición 27 de SOSTENIBLEMENTE con énfasis en el concepto de Desarrollo
Regenerativo.